De costa a costa y tiro porque me toca. Tras el paraíso azul de Perhentian Kecil, pocas ganas había de partir. Pero, ¿y si hay otras playas? ¿y si son mejores? No podíamos arriesgarnos a perdérnoslo. Cogimos el "fastboat" de vuelta hacia la ciudad portuaria de Kuala Besut, para allí pillar un bus hasta la principal ciudad de la zona: Kota Bahru. Nuestra intención era cruzar el país para visitar la península de Penang, cuya capital es Georgetown, puerto de partida hacia la maravillosa isla de Langkawi. Antes, como no, un buen desayuno local, roti canai.
Hasta las etapas de trámite como la que nos tocaba, esperando a la noche para tomar el bus nocturno al Oeste, a veces nos deparan sorpresas. Y es que camino a la estación de autobuses nos abordó un simpático lugareño con la intención de acercarnos en su coche. Al principio fuimos un poco desconfiados, muchas veces nos han querido ayudar pero siempre a cambio de pasta. Pero Nick (así se llama) solo quería compartir sus horas de descanso en el trabajo con nosotros y así mejorar su inglés.
La verdad es que se portó, llevándonos a diferentes lugares de la cuidad sin pedirnos nada a cambio. Por no querer no se hizo ni foto con nosotros (aunque le hicimos una de "estrangis"). Nosotros le bautizamos con el nombre de Yowen (es una larga historia con muchas risas de por medio). Al final se tuvo que ir al curro y nos dejó cerca de la estación donde cogeríamos el bus a Georgetown. ¡Muchas gracias Yowen!
Georgetown fue colonia inglesa durante muchos años, cosa de la que no te quedan dudas nada más pisar su casco antiguo, y aun más si llegas a su paseo del puerto. Además de su atractivo aire colonial al más puro estilo del Caribe de la época pirata, su casco antiguo goza de un ambiente bohemio y artístico que, sumado a que siempre hay gente de todas partes y al bajo precio de la comida (riquísima) y bebida, hace de esta ciudad un lugar ideal para pasear, tomar algo y relacionarte.
Y eso hicimos, caminar por sus calles llenas de color en forma de murales, graffittis y obras bastante chulas; perdernos por sus barrios indio y chino, llenos de templos; comer en cualquiera de los locales de la capital culinaria de Malasia; y beber cerveza Tiger a muy buen precio en cualquiera de sus múltiples bares y pubs con "happy hour".
Georgetown, a parte de toda la oferta cultural que brindan sus múseos, galerías, etc...es la ciudad con más ambiente nocturno que nos hemos encontrado hasta ahora. Nos encantaron los hostales de la calle Love Lane donde nos alojamos, en el Reggae el primer día antes de zarpar a Langkawi y en el Love Inn a la vuelta de la isla. Allí encontramos varios personajes bastante interesantes y ¡mucho cachondeo!
Vamos con las fotos. Ah, y ya mismo publicamos Langkawi también que vamos con un poco de retraso.