Pero no iba a ser tan fácil. No sabemos aún si la fecha elegida tenía que ver o si siempre es así (lo dudo), pero tardamos algo más de 3 horazas en poder cruzar. La primera parte, salir de Camboya. El bus nos soltó cual manada de guiris frente a la "oficina de inmigración", es decir, una caseta con un tejadillo metálico a 35 grados a la sombra y con todos los bártulos encima. Nos tocó esperar como una hora hacinados en la poca sombra que había para poder sellar el pasaporte y cruzar al otro lado.
Bien, lo conseguimos. Pero al llegar al puesto fronterizo tailandés...cientos de guiris agolpados en un sala con 5 policías trabajando y haciéndose selfies con la cantidad de gente que había de fondo! Nuestro gozo en un pozo, así que tocó esperar 2 horas más a que nos tocara, y encima a Miguel le hicieron un interrogatorio que yo creía que no le dejaban pasar. Pero bueno ahora si, prueba superada.
Una furgoneta nos esperaba en ese lado y, previa parada en un área de descanso cercana donde pudimos comer algo a las 4:30 de la tarde, partimos hasta nuestro deseado destino.
Y allí estábamos, en la zona mochilera por excelencia, diría que de todo el Sudeste asiático: Khao San Road. Luces, puestos, albergues y guesthouse por doquier, comida callejera, locales con música en directo, happy hours para beber hasta acabar por los suelos y, sobre todo, muuuucha gente con ganas de pasar un buen rato y hacer amigos.
Nos alejamos un par de calles buscando alojamiento más económico y dimos con una casa de huéspedes/restaurante con habitaciones sencillas y tranquilas y a un precio razonable. Allí nos quedamos los siguientes 5 días. Y de ese tiempo la mitad atrapados en "el barrio".
Más que Khao San, a nosotros nos enamoró su vecina Rambrutti. Una calle con mucho ambiente, perfecta para cenar, tomar unas cervezas u oír música en directo. Vamos, encontramos algo así como nuestro Lavapies tailandés.
Su hermana mayor es mucho más ruidosa y escandalosa y pasar una noche allí es toda una locura, como comprobamos en Nochevieja.
Y es que ya era 31 y tocaba celebrar por lo alto. No teníamos muchos planes, solo que desde hacía unos días por medio de un grupo de mochileros habíamos creado un grupito de latinos que íbamos a estar por allí esos días y organizamos una quedada, a la que entre mucha gente se unieron Marc y Judith, la pareja de catalanes que conocimos en el bus de Hoi An a Saigón.
Algunos empezamos a tomar desde la tarde, como manda la tradición. Y otros se fueron uniendo en la noche.
Cenamos comida Thai en un restaurante familiar de la zona, intercambiamos anécdotas e información de lo que habíamos hecho ya o lo que nos quedaba, reímos bastante y brindamos como no!
Bangkok es la cuidad de transito, en la que te encuentras gente que acaba de empezar a viajar, los que se van en unos días o como nosotros los que la usan de paso varias veces.
A eso de las 11 nos dimos cuenta que no habíamos pensado donde ir a ver la cuenta atrás y como el "World Center" (algo así como la puerta del sol en estos casos) estaba lejos y al parecer llenos, fuimos hacia el río donde aparte de pantallas con la cuenta atrás habría fuegos artificiales. Pero mucha gente para movernos, así que corrimos y acabamos perdiéndonos unos de otros. Nosotros tomamos los "gajos de mandarina" con una pareja chilena al lado del río pero sin llegar del todo al lugar donde estaba todo el mundo y dimos la bienvenida al 2016 6 horas antes que España.
Pasados los fuegos artificiales, volvimos a Khao San y allí localizamos al resto del grupo en el Center, el pub donde sabíamos que iban a estar. Y, a partir de ahí, os podéis imaginar, beber, reír, bailar...miles de personas llenando la famosa calle, bailando y celebrando como en el resto del mundo.
Una gran noche con la que empezar un nuevo año,cargado de ilusiones y sueños por cumplir.
Solo teníamos una espinita que era no haber podido ver la ultima puesta de Sol del año (estoy enganchada), así que al día siguiente y tras pasar la etapa más crítica de la resaca, nos acercamos a ver el primer ocaso del 2016, que no sé por qué, pero me da a mí que va a ser un gran año.
Mucha felicidad para todos!!!Os queremos
Por cierto, perdonar la calidad de algunas fotos. A determinadas horas hacer una foto con el móvil no siempre sale bien...
No hay comentarios:
Publicar un comentario